Es increíble que en tan sólo un día todos los sueños de dos personas se hagan realidad, ¿no crees? El día de la boda se transforma, así de pronto, en una de las jornadas que cambiarán por completo la vida de quienes dicen “Sí, acepto” y se entregan el uno al otro para construir un camino de vida que sólo multiplique oportunidades y aventuras. Para consolidar la gran historia de amor de Karen y Joss qué mejor que hacer un viaje de lo más romántico a Puebla para conocer los detalles de un gran día que estuvo lleno de detalles, color y de una personalidad que, sin duda, ¡me conquistó! No dejes de ver las increíbles fotografías de Memo Márquez.
Vestida de romance
Si hay algo que tengo muy claro es que la imagen de la novia dice mucho más de lo que cualquiera se podría imaginar. Con ello no quiero minimizar al novio, pero es que lo sabemos… ¡Ellas son las estrellas del gran día! Para la boda, Karen se decantó por un vestido de novia corte princesa, un diseño exquisito acompañado por detalles de lazos, así como por un encantador escote en la espalda que le de daba un giro extraordinario a la sencillez de su imagen. Me encantó su imagen, sobre todo por los accesorios de novia que eligió para brillar con luz propia, así como por ese recogido de novia que matizaba el toque clásico y atemporal de su estilismo. Para el maquillaje, nada tan hermoso como un delineado perfecto de ojos, un elemento queme hizo recordar a Adele, ¿a ti no? No pierdas detalle de las cosas que debes hacer antes de ponerte el vestido de novia.
Un primer encuentro para siempre
El first look de los novios fue espectacular, y es que nada me emociona más que ver la sonrisa infinita de un hombre enamorado de quien será su esposa y compañera para toda la vida. Joss, además, se veía guapísimo con un traje de novio elegante en color negro, así como con accesorios para novio en toques de blanco (tomen nota del pañuelo, porque muy pronto los boutonnieres estarán fuera del mapa). Los novios posaron felices ante la lente de Memo para iniciar con los recuerdos de ese gran día. Sin duda, me fascinó cómo lucieron los dos en perfecta armonía y con esa mirada distintiva de quien sabe que se enfrenta a la mejor experiencia de su vida entera.
“Sí, acepto” una y mil veces
Después de disfrutarse por unos momentos, los novios e invitados se dieron cita en la iglesia en la que habrían de convertirse en recién casados. Karen llegó hasta el altar del brazo de su padre, para disfrutar de una ceremonia emotiva y perfecta para los dos. Al término, la salida no pudo haber sido mejor: dos novios emocionados, felices y listos para empezar el diseño de una eternidad absoluta y única.
Detalles sublimes
El Hotel La Purificadora fue la locación perfecta para celebrar el amor de Karen y Joss. Las instalaciones de este magnífico lugar se vistieron de boda, color y muchas tendencias; la decoración al estilo rústico se acompañó con un sinfín de colores que reflejaban el romanticismo de una estética Soft Pop fuera de serie. Las mesas del banquete se adornaron con caminos de mesa hechos con textiles, así como con montajes personalizados que apostaban por ensalzar la magia del color rosa, en armonía con pequeños detalles naturales. Los centros de mesa destacaron con flores en distintas tonalidades, así como una decoración con velas que le dio calidez a un ambiente en donde la personalidad de los novios fue la sensación.
Un pastel de boda con tendencia All White apostaba por deleitar a todos los invitados, pero lo que más llamó la atención fueron los muñecos en forma de marmotas, un detalle muy divertido que también reflejaba la esencia de los recién casados. Todo se llenó de luz y magia, sobre todo en el momento en que ambos compartieron su primer baile como esposos, unos minutos absolutamente emotivos. Una boda que lo tuvo todo: diversión, estilo y un sinfín de detalles que, al menos a mí, me hicieron vibrar ¡como nunca!
Si necesitas inspiración para tener un gran día espectacular, también te recomiendo: La boda de Jen y Matt: Un gran día en el paraíso de Sayulita, Contigo la vida es color de rosa: La boda de Patty y David y Un verbo que nos conjugue a los dos: La boda de Ceci y Rene.
Fotografía: Memo Márquez | Segunda cámara: Julio González | Locación: La Purificadora | Wedding planner: Noé Ariza | Música: Zap Producciones
Selecciona a los proveedores que quieres contactar
Entérate antes que nadie de lo último en tendencias para bodas
Suscríbete a nuestra newsletter
Escribe tu opinión