El organizar una boda es algo mágico, sin duda durante el proceso te sobrarán manos para ayudarte con la mejor de las intenciones porque te quieren, pero a veces no es lo que estás buscando. No seas una novia que te pierdas en el camino y dejes de disfrutar la planeación del día más feliz de tu vida, por complacer a todas las personas que quieres y también a otras que ni conoces.
Después de anunciar su compromiso al mundo, el nivel de emoción estará más neutral, pero vendrá el estrés por tener la necesidad de abordar ciertos temas de la boda, que posiblemente nunca han tocado entre ustedes y con terceros.
Las pláticas de boda que surgen durante la organización no tienen porque ser discusiones sin fin. Para ser honesta, pueden ser totalmente lo opuesto. Es cuestión de ponerse de acuerdo en cómo quieren manejar las cosas con familia, amigos y proveedores, para siempre quedar bien con todos sin dejar de ser fieles a lo que ustedes desean. Lo que nunca deben hacer, es perder de vista el objetivo de la plática, que es su boda.
Durante los 12 meses aprox. de la planeación de tu boda, tendrás ciertas conversaciones sobre tu boda que serán, cuanto menos, incómodas. Debes olvidarte del stress y saber sobrellevarlas para salir triunfante de ellas. A continuación te contamos las 10 conversaciones incómodas que tendrás con respecto a tu boda. Aprende a salir bien librada de la situación, el resultado hará que tus noches las utilices realmente para dormir y no para compartir con tu almohada el stress por no saber decir que no.
Plática incómoda 1:
- Familia. Necesitarás preguntar si cuentan o no con su apoyo económico y de cuánto se trata.
Siempre sé humilde como para aceptar un regalo y nunca dejes de agradecer. No te olvides de mencionar que el dinero recibido, será destinado para lo que ustedes decidan. Para evitar sorpresas, con tener que dar explicaciones de en qué se está gastando el dinero que te dieron. Al final de cuentas, fue un regalo.
Plática incómoda 2:
- Amistades Vendrá el bombardeo de ayuda. Las ofertas son las más auténticas que imagines, pero pueden no ser lo que estás buscando para tu gran día. Tu amiga puede ser la mejor florista del mundo, pero su estilo no es el tuyo, o simplemente no te gusta. Deberás aprender a decir que no
El ofrecimiento de servicios gratuitos por amistades puede sonar tentador, pero es mejor agradecer y decir que prefieres pagar para exigir y que no estás dispuesta a perder una buena amistad por un arreglo de flores gratis. La mejor recomendación es que pongas tu boda en manos de expertos, que efectivamente, cobrarán por su trabajo, pero a quienes podrás explicarles todas tus ideas y expectativas acerca de la boda.
Plática incómoda 3:
- Proveedores. Deberás ser honesta al decir cuál es el presupuesto que tienes destinado para cada servicio y no aceptar cosas ni tratos que no te den buena espina. Sé sincera con todas tus necesidades y gustos, al final del día, son los que van a hacer posible materializar tu sueño.
La honestidad que des, la recibirás. Estarás en contacto al menos una vez por semana con los proveedores por 12 meses. Empieza bien la relación con ellos y el resultado te sorprenderá. Por otro lado, siempre puedes dejar este paso en manos de un wedding planner, es la mejor forma de librarte del stress que provoca la organización de tu boda.
Plática incómoda 4:
- Compromisos de familia. Los padres de ambos siempre tendrán amigos que invitar porque ellos fueron invitados a las bodas de sus hijos. Y seguramente habrá gente en la familia que pida invitaciones especiales para gente que no conoces o que no es tan cercana a ti. Estás en todo tu derecho de decir que no. Aunque sean los mejores amigos, socios o familiares de alguien que aprecias, ¡no estás obligada!
Aunque no tengan una boda pequeña. Informa a sus familias que quieres tener una boda únicamente con las personas que quieres. Recuerda siempre, tu boda, tus reglas.
Plática incómoda 5:
- Lista de invitados. Deberás hablar con tu prometido acerca de cómo repartirán el número de invitados y créeme, no será nada fácil. Primero decidan si sueñan con una boda íntima o una boda por todo lo alto. Y después tomen papel y pluma y empiecen a escribir nombres de las personas que son imprescindibles para ustedes.
No hables mucho del tema de tu boda con gente que no está incluida, te hará sentir menos incómoda y a ellos también. A los invitados que tengan hijos, es el momento perfecto para avisar si pueden o no llevar a sus hijos a la celebración.
También lee: Cómo hacer una buena lista de invitados: 5 tips para lograr el objetivo
Plática incómoda 6:
- Damas de honor. Será imposible tener como damas a todas tus amigas. Y tendrás que hablarlo con ellas y elegir solo a las mejores. (Además de decirle a las demás que no serán tus damas)
Aunque tengas amigas muy cercanas, no significa que sean las mejores para ti. Lo que puedes hacer es darle un papel a cada una, por ejemplo: el ramo, lecturas, arras, etc. Así aunque no sean tus damas, se sentirán parte de tu gran día y no tendrás problema alguno.
Plática incómoda 7:
- Opinión de mamá. Hablar con tu mamá sobre la boda es imprescindible, tanto si necesitas un consejo, como si deseas contarle algo. Pero deberás poner límites. Seguramente desea que uses cosas de ella o algo que ha estado por generaciones en su familia, y esto es muy tierno, pero ¿es lo que quieres?
Tu boda tiene que reflejar tu propio estilo. Da las gracias y di que no es algo que vaya con tu personalidad y lo que quieres es sentirte tú misma en el gran día.
Plática incómoda 8:
- Responsabilidades básicas. Todo el mundo querrá ser parte de tu celebración. Pero no todos pueden ser parte más allá de estar invitados y festejar contigo. Aquí una vez más tendrás que saber decir no. No cometas el error de repartir tus pertenencias, como los anillos, las arras, el papel donde tienes escrito tus votos, etc.
Tus damas serán las primeras en ofrecer su ayuda para ser las responsables de los items más importantes. Pero, corres el riesgo de que lleguen tarde, o en el peor de los casos, que los pierdan. Tu respuesta para su ofrecimiento te recomiendo que sea, que tú wedding planner es la encargada de llevar y guardar todos tus artículos importantes.
Plática incómoda 9:
- Unas copas de más. Habla con tu familia y amigos más cercanos acerca de limitar las bebidas que toman. Tener una persona muy cercana a ti, que pierda los estribos debido al alcohol, te provocará mucho estrés, y podría arruinar tu noche. Si tienes a alguien cercano que pueda hacerlo deberás hablar con él y prevenir una situación incómoda en tu gran día.
No tienes porque pasar un trago amargo. Lo más inteligente que puedes hacer en estos casos es hablar directamente con la persona y avisar a tu wedding planner y al capitán de meseros sobre esta persona, ellos se encargaran de que sus bebidas estén muy ligeras y no tendrán que pasar por un momento incómodo.
Plática incómoda 10:
- Mamá / suegra enamoradas del protagonismo. No faltará alguien que quiera tener el control de TODO, pedidas, despedidas, boda y del after también. Tendrás que hablar del tema con esa persona y repartir tareas entre tus amigas más cercanas para evitar que la otra persona tome todo el control.
Habla con ellas desde el principio para evitar conflictos en el camino. Que tus palabras sean: “suegra/mamá creo que nuestras personalidades son tan distintas que podemos tener problemas, lo que más deseo es disfrutar mi día al 100% junto a ti” y da las gracias.
Tras haber pasado por estas 10 conversaciones incómodas, vas a ir viendo lo fácil y llevadero que será todo. Recuerda que siempre es importante tener una plática que no sea 100% cómoda en el momento correcto que lamentarte tras haber tenido que componer una situación fuera de control. No te olvides que el propósito de toda esta larga planeación, es que vivas intensamente el día más feliz de tu vida.
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