Sabemos lo importante que son, han sido y seguirán siendo la Bodas. Nunca dejarán de existir. ¿han cambiado? Sí, ¡muchísimo! Como también han cambiado las novias. En los últimos años, el ritmo acelerado de los tiempos, logra que todo se viva más rápido, es por ello que entendemos la prisa y también el estrés que puedes tener en el día a día y sobretodo cuando lo combinas con los preparativos de tu boda. Una manera de aminorar ese estrés es conociendo los errores más comunes en que la gran mayoría de parejas cometen, para tratar de evitarlos en tu gran día. Son muchos, bien dicen que nadie experimenta en cabeza ajena, pero aquí te presentamos los más graves para que no caigas en ellos y disfrutes de tu boda el 100%. La boda inicia desde los preparativos, no lo olvides.
No planear todo con tiempo
Sabemos que te acaban de dar el anillo y ya te urge que llegue el día, pues entonces debes iniciar con la planeación cuanto antes. Por más sencilla que desees tu boda, hay tiempos definidos, sobre todo si vas a querer una ceremonia religiosa católica, mínimo debes contar con 4 o 5 meses para los trámites correspondientes, revisar agendas de jueces y proveedores involucrados. Todo lleva su tiempo. Planea y lleva una agenda adecuada. En la app de Zankyou puedes encontrar herramientas para organizarte y planear tu boda de principio a fin.
Pensar que puedes hacerlo todo sola
Son muchas las actividades, las citas, las revisiones, detalles a programar, las búsquedas de proveedores, de lugares, etc. Acepta o busca ayuda, en especial si es de un profesional como un wedding planner, si buscas con tiempo seguramente encontrarás al más adecuado y que haga click con ustedes. Es increíble que aún existan bodas que terminan en desastre por organizarla sin la ayuda de un wedding planner, la experiencia y el saber hacer, se nota en los resultados finales.
Querer decidir todo tú misma
Por más ocupada que esté tu pareja consúltale las decisiones o divídanse funciones. Si no tienes idea de cómo lograrlo, te recomendamos leer: 8 formas de involucrar a tu novio en la planeación de tu boda.
La boda es para ambos, intenta que los preparativos no provoquen discusiones entre ustedes. Y en cuanto a las familias, recuerda que es un acontecimiento importante, coméntales, hazlos partícipes en una comida familiar y escucha sus opiniones (escúchalos aunque no les hagas caso en todo), para que no se sientan excluidos. Analizar lo que te proponen también te puede ayudar para darle dirección a tus decisiones al lado de tu pareja.
No hacer un presupuesto aterrizado
Todo inicia con saber cosas básicas como cuántas personas quieren invitar a la boda, qué tipo de boda desean, si alguien los va a apoyar con algo de la boda y saber perfectamente en qué consiste esa ayuda. Tener un presupuesto real, te permite planear sin frustraciones. Te sugiero no tener un presupuesto justo, sino siempre contar con un extra para cualquier eventualidad. Y de verdad, si consideran que aún no cuentan con el recurso suficiente para tener la boda de sus sueños, aplacen la fecha solo un poco y ahorren un poco más. Verán cómo poco a poco todo se acomoda.
Descubre: cómo calcular el presupuesto de boda en México. 5 tips básicos y esenciales
Pensar en una boda solo para ustedes
Sabemos que una boda perfecta refleja la personalidad de los novios, pero es un muy buen gesto pensar en los invitados. Y no digo que hay que darle gusto a todos, pero piensen por ejemplo en los detalles de la comida, de la música, del lugar. Al final aunque sea su boda, también se trata de que todos estén felices de compartir el gran día con ustedes. Tener un poco de consideración en detalles para con ellos, hará que todos recuerden su boda de una forma positiva.
Y ya en el día de la Boda , te sugiero que No caigas en estos dos importantes errores:
No tomarse fotos con la familia
Tal vez las consideren anticuadas, pero recuerden que las fotos son lo único tangible que queda de una boda. Tómate fotos con tus amigos y sobre todo disfruta de esa gran compañía.
Dejar que Bridezilla aparezca
El día que menos debe aparecer es el día de tu boda. Debes ser consciente de que no todo será perfecto, habrá detalles que tal vez notes, si son solo detalles déjalos pasar o pídele a alguien más que se encargue de ellos y los resuelva. Habrá otros detalles que ni siquiera notarás. Pero vive al máximo el gran día y deja de lado las preocupaciones y el stress.
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