Desde el momento en el que aceptas una propuesta de matrimonio se viene un torrencial de emociones y también de toma de decisiones, la mayoría en torno a la boda. Pero también, muchas personas piensan sobre el futuro que tendrán con su pareja y lo que vendrá después de un compromiso tan importante, saber si deberías terminar la relación puede ser toda una batalla de emociones y pensamientos que aquí te ayudaremos a entender.
Seguro que queremos que tu noviazgo llegue al siguiente nivel, pero también queremos lo mejor para ti y por eso entrevistamos a una experta en terapia individual y de pareja para saber las razones por las que deberías de romper tu compromiso y esto es lo que tuvo que decir Elaine Malavolti, psicóloga integrativa personalista.
Vayámonos a las bases y conozcamos primero las señales de alerta durante el noviazgo para no llegar al matrimonio. Según Walter Riso, en su guía para no caer en la dependencia emocional, hay que terminar una relación cuando ya no hay amor (y con más ganas si te lo dicen abiertamente); cuando se imponen limitantes en cuanto a la autorrealización, no se vale que te digan que no podrás cumplir tus sueños y tampoco que te impidan trabajar o te obliguen a ello; la última señal de alerta sería el ver tu esencia, tus creencias y valores en peligro a causa de la relación.
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Una gran ayuda para saber si el noviazgo va por buen camino es el plantearse algunas preguntas y contestarlas con total honestidad, Elaine recomienda preguntarse lo siguiente:
1. ¿Qué tan compatibles somos?
Al responder presta atención a sus ideas sobre la familia, sus valores y sus hábitos laborales. “Cada aspecto de su vida dice algo sobre su forma de ser y de pensar. Es importante que tu pareja se sienta cómoda con tus propios ideales y hábitos, la compatibilidad debe ser mutua para que realmente funcione”.
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2. ¿Cómo es nuestra convivencia?
Debes convivir con él para realmente conocerlo, para ver cuáles son sus aficiones, y descubrir qué es lo que te gusta y lo que no te gusta de él. “Toma las cosas que te desagradan y pregúntate si es posible que convivas con ello el resto de tu vida y también pregúntate si tienen lo suficiente en común como hacerse felices el uno al otro”.
3. ¿Pensamos de manera similar?
Piensa en los intereses que tienen en común, pero también en temas cruciales de la vida de pareja. Si no coincide contigo en tus planes a futuro y temas como estos es una señal de alerta: “¿Cuántos hijos quieren tener? ¿Cuáles son sus planes para el futuro? ¿Vivirán solos o en casa de sus padres? ¿Les gustan las mascotas? ¿Piensan en irse del país? ¿Se lleva bien con tu familia?”
4. ¿Realmente nos comunicamos?
Piensa en cómo resuelven sus problemas y cómo toman decisiones. “Toda buena relación depende directamente de una buena comunicación entre ambos. Si tu pareja no se comunica contigo, si no habla de sus problemas, sus temores, sus anhelos, entonces puede que no sea la persona correcta para el matrimonio”.
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5. ¿Hay suficiente confianza entre nosotros?
“Tanto tú como tu pareja deben estar seguros y mantener una confianza absoluta entre ustedes. Si tu pareja tiene celos descontrolados, terminará colmando tu paciencia y te arrepentirás de haberte casado. Si tú desconfías de tu pareja debes analizar si esta desconfianza está justificada o no”.
6. ¿Cómo reacciona ante los problemas?
Piensa en situaciones como una crisis en el trabajo o financieras, una pelea familiar o algún arrebato de celos, ¿Cómo suele comportarse?, “¿Se expresa y desenvuelve acorde a las circunstancias? ¿Tiene algún vicio que podría perjudicar a la familia que formen?”
Contestar estas preguntas te ayudará muchísimo a saber hacia dónde podría ir tu relación y a darte cuenta si deberías de terminar tu compromiso. Otro tipo de razones por las que deberías salir corriendo en dirección contraria sería en casos de violencia, infidelidad, celos desmedidos, manipulación y mentiras en temas esenciales.
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Muchos problemas pueden tener solución si se acercan a tiempo a una terapia y también se pueden evitar con buena comunicación y diálogo y esa será la base para vivir e amor. “El amor es hermoso cuando se vive con este deseo e ilusión de hacer feliz al otro. Pero esto se construye en el día a día de la relación de noviazgo y por supuesto se sigue en la relación de pareja constituida en el matrimonio”.
“Recuerda que es preferible que llores ahora por una ruptura que puedes superar y no que te la pases llorando durante toda tu vida. Una vez que se adquiere el compromiso de matrimonio, se torna difícil tomar decisiones extremas, como la separación o el divorcio”, ¡se muy sincera contigo misma, te podrías arrepentir! .
Elaine Malavolti Psicóloga integrativa personalista | 5522546083 | elainemalavolti@gmail.com
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