Más allá de los trucos, la magia sí existe. El amor lo puede todo, y más cuando se trata de crear nuevos caminos, nuevas aventuras, nuevos todos. En esta ocasión te invito a que formes parte de una boda extraordinaria de principio a fin, una celebración que logró combinar las grandes tradiciones ancestrales con los ritos clásicos de un “sí, acepto”. Es momento de dejarse llevar por las maravillosas fotografías de Fernando García, uno de los grandes talentos que ha sabido darle vida, emoción y perfección a cada una de las historias que han formado parte de su trayectoria. Ahora sí, es momento de conocer la magia pura entre Sofía y Antonio.
La novia
Para su gran día, Sofía apostó por un diseño muy peculiar. Un vestido de novia línea A con una falda preciosa y un escote halter con cuello alzado fue el ganador para que ella caminar hacia el altar. La cantidad de detalles que se sumaban al cuerpo de esta magnífica creación resultaron una verdadera obra de arte, además de todos los acentos que se conjugaban en los tejidos espectaculares de esta propuesta. La novia, además, apostó por un recogido de novia clásico y muy elegante, mismo que complementó con un tocado plagado de plumas para hacer su look muy divertido y original. ¿El maquillaje? Se mantuvo hacia lo atemporal, haciendo un claro énfasis en la mirada de Sofía y en sus rasgos naturales.
El novio
Alberto, por su parte, decidió lucir increíble junto al amor de su vida con un traje de novio muy elegante y tradicional. El saco azul marino, en combinación con el chaleco gris y la corbata en rosa intenso figuraron como los aliados perfectos para armar un contraste ideal no solo con Sofía, sino también con los maravillosos derredores de Morelos. Lo que sí es cierto es que ambos se vieron completamente enamorados.
La ceremonia
La capilla de Hacienda San Carlos Borromeo fue el lugar perfecto para que este par se dieran el “sí, acepto” en un marco lleno de texturas e historia. El pasillo hacia el altar se cubrió con pétalos de flores y, por otra parte, la decoración con velas hizo que el ambiente se tornara aún más cálido y romántico. Ya en el altar, Sofía y Alberto se juraron amor eterno en una ceremonia encantadora y llena de magia, siempre unidos por ese lazo inquebrantable que los habría de acompañar en este nuevo capítulo de su gran historia. Al término de esta fase, los novios e invitados, acompañados de la lluvia, disfrutaron de una ceremonia espiritual, en donde las culturas ancestrales llevaron el significado de su existencia a un nivel máximo para consolidar la unión de estos enamorados.
La recepción
Posteriormente, novios e invitados se dieron cita en los cascos de esta hacienda hermosa. Las velas figuraron como el detalle principal de la decoración de esta boda, acompañadas de motivos pintados a mano para enfatizar el amor por el arte mexicano. La pista recibió a los recién casados para el primer baile de esposos, el cual se alumbró con chisperos y luces que hicieron ese momento más único, así como las miradas de todos los invitados alrededor de ellos dos. Las velas colgantes también resultaron ideales para crear un escenario mágico alrededor de Sofía y Antonio… ¡increíble! Por supuesto que no podían faltar los fuegos artificiales para incrementar la unicidad de este espectáculo de amor.
No pierdas ni un solo detalle de esta boda impresionante. Cada una de estas fotografías te dará la inspiración que necesites para diseñar la boda de tus sueños. ¿Lista para crear lo inimaginable?
Fotografía: Fernando García | Locación: Hacienda San Carlos Borromeo | DJ: Alonso Rivero | Catering: Concept Events | Segunda cámara: Petul Angeles
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