Si eres novia, seguro te sentirás identificada con esta nota, y si no lo eres, entonces esta será tu gran oportunidad para que no quedes en la lista negra de la mujer que está organizando todo para el gran día. Puede que no lo entiendas del todo si aún no has estado en el papel de “novia”; sin embargo hay muchas cosas que se conjugan en la mente de quien espera materializar la perfección en tan sólo un día. Para que no cometas un gran error, te recomendamos que vuelvas a checar el celular y, de ser posible, evites estos mensajes de texto que jamás le deben llegar a la novia en cuestión. ¡Querrás tomar nota!
1. “Está increíble el anillo. ¡Ya quiero que me invites!”
Puede parecer muy obvio que si te manda la foto del anillo estés invitada a la boda, pero ¡no saques conclusiones anticipadas! El hecho de haber sido parte de la noticia, no significa que muy pronto estarás recibiendo una notificación de que fuiste invitada, o bien, de que formarás parte del cortejo. Lo mejor es que sólo la felicites por su compromiso, ¡y listo! Seguro estás ya contemplada en la lista, pero mejor recibir la noticia de su parte que anticiparte, ¿no crees?
2. “Ya vi la foto, ¿segura quieres ese vestido de novia?”
Si no fuiste invitada a la prueba del vestido, pero aún así la novia decidió mandarte una imagen por mensaje para que la vieras con el diseño que eligió, entonces ¡apóyala al 100%! A menos que de verdad la elección haya sido la peor de la historia, lo mejor es que le eches porras a la novia en cuestión para que se sienta más segura y con la confianza de que se verá guapísima en su gran día. Nada de describirle todos y cada uno de los defectos físicos que le ves a ella, o bien, volverte experta de moda por un segundo y hacer una lista de todo lo que puede salir mal con el vestido. Recuerda que es su boda y tú estás ahí para ella… ¡en todo momento!
3. “No es muy mi estilo, pero como veas”
Lo importante, aunque se lea muy feo, no es que te guste la boda a ti ¡sino a la novia! ¿Eres dama de boda?, ¿te ha hecho parte de su equipo de apoyo? Demuestra que confías plenamente en sus decisiones y hazle ver que todo lo que elija para el gran día tiene que ser el reflejo de quien es ella. Más allá de si crees que está bonito o no, lo fundamental es que a ella le guste y quede satisfecha con el resultado de su gran día.
4. “¿Segura? Eso ya ni siquiera está de moda”
Para la decoración, el lugar, los colores, su estilismo, ¡o lo que sea! No importa si está en tendencia o no. Aunque tengas muchas ganas de meter la cuchara en los planes de boda de tu amiga, prima o hermana, recuerda que muy pronto llegará tu momento, y entonces entenderás que las decisiones externas no serán tus favoritas. Mejor borra ese mensaje de texto y cámbialo por algo más positivo. Toma nota de por qué debes hacer en tu boda lo que se te antoje.
5. “Oye, ya me llegó la invitación. ¿Me das otro boleto?”
A ver… ¡No! Si en la invitación viene especificado que puedes llevar pareja, entonces tienes todo el permiso de la novia para llevar a quien quieras; sin embargo si la indicación no viene, lo mejor será que te guardes la pregunta y asistas a la boda solita. Ahora, si tuviste la fortuna de recibir un boleto extra, entonces ¡ya no pidas otros! Créenos, no se trata de una mala atención de la novia hacia ti, sino de todo un tema de presupuesto, logística y organización que viene detrás. Si eres novia, descubre cómo lidiar con los momentos más estresantes durante la planeación de la boda.
6. “Amiga, ¿no prefieres hacer tu despedida de soltera en otro lugar?”
¿Te adelantamos la respuesta? No, la verdad es que la novia no quiere celebrar su despedida en otro lugar que no sea el que ella ya ha escogido previamente. A ver, aquí hay que entender que muchas de las decisiones que ella tome no serán de tu agrado, pero recuerda que es la estrella y que, al menos por un tiempo, habrán (tú y todas las amigas) de apoyarla en lo que a ella más le guste para que el proceso de organización sea el más óptimo. Después de que pase la boda podrán desquitarse, ¡en serio!
7. “Ya dime en serio… ¿Cuánto has bajado de peso?”
¡¿Perdón?! No, en serio mejor no le mandes ese mensaje. Existen demasiadas presiones en la mente de una novia, así que ¿para qué atormentarla con un tema tan delicado? Si ya decidió someterse a una rutina de ejercicio, entonces los resultados se verán en el gran día; y si no quiso sufrir con dieta y ejercicio para antes de la boda, ¡también es respetable! Más allá de cuánto pese, lo ideal es que la hagas sentir guapísima y completamente segura de sí misma.
8. “Igual deberías invertirle más a la boda”
Sobre todo si la novia eligió hacer una boda con muy poco presupuesto o muy pequeña, entonces mejor no le mandes ese mensaje proponiendo que le meta más dinero a la celebración. Ella y su chico tendrán sus razones para haber diseñado ese presupuesto y, francamente, es su decisión el manejo que le darán a esa cantidad. Si ya tenías pensado enviarle ese mensaje, mejor bórralo de tu mente, guarda el celular y aléjalo de ti ¡de inmediato! Te puede ayudar saber cuánto puedes invertir en la recepción de tu boda.
9. “No te vayas a deprimir si algo sale mal”
Puede que este mensaje de texto parezca inofensivo, pero si lo lees detenidamente no hay peor frase de espanto para una novia que esa. Quien está en medio de la organización de la boda no quiere pensar en que algo pueda salir mal, y aunque el consejo es bueno, lo mejor será que cambies la negación por: “amiga, sé que tu boda va a estar increíble” o algo por el estilo. Borra de tus mensajes futuros todas las palabras con alguna connotación negativa y sé, al menos en estos meses, una verdadera porrista para la novia en cuestión.
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Fotos de Kape Photography, Adriana Cruz, Aniela Fotografía, Alejandro Souza, Jorge Kick, Evgenia Kostiaeva, Sergio Quezada y Petul Angeles
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