Una boda al natural… ¿acaso hay algo mejor? Cada vez que me encuentro con celebraciones especiales, no dudo en admirar cada detalle de estas. Al parecer las bodas tienen superpoderes, y es que nada se compara con el hecho de ver dos vidas transformadas con tan solo pronunciar un par de palabras. Camille y Kris se juraron amor eterno en un marco extraordinario, en donde el verde del paraíso se conjugó con el azul del mar y con los miles de colores que sobresalían en el ramo de la novia. Si quieres ser parte de esta gran historia de amor, te invito a ver todas las fotografías que inmortalizaron la nueva aventura de este par de enamorados. Estoy segura que amarás las tomas de Aniela Fotografía.
¿En qué radican las bodas perfectas? Me atrevería a escribir que, más allá de los grandes presupuestos y las producciones exorbitantes, lo que realmente llama la atención en este tipo de eventos es ser testigo de toda esa ola de emociones genuinas que solo son producto del amor verdadero. En el caso de Camille y Kris, este par de novios decidieron sellar la promesa más importante de sus vidas frente a unos cuantos, los más cercanos y quienes han estado presentes en su relación. Los detalles fueron perfectos, sutiles, discretos y con la cantidad de color suficiente para no opacar la presencia tan sublime del mar. Entre cielos despejados y un clima cálido, esta pareja nos dio una buena clase de cómo tener un gran día digno de ser recordado ¡para siempre!
La novia
Lo he escrito una y mil veces, pero es que de verdad no hay nada que me guste tanto como el estilismo por el cual se decantan las novias. Más allá de hacer una elección aleatoria en torno al vestido de novia y esos accesorios que utilizarán, cada una de estas piezas configura la extensión de personalidad y carácter de esa mujer enamorada. Para ese gran día, Camille apostó por un delicado vestido con bordados de encaje en el cuerpo, una falda de caída fluida y un escote redondo que armonizaba perfectamente con el lugar elegido para la celebración. Por supuesto que su look no podía quedar sin un peinado recogido de lo más romántico, ideal para el clima de Cozumel y una gran opción para sumar a la ecuación el tocado perfecto con aplicaciones de pedrería. Como acentos finales, nada tan acertado como un velo de novia tradicional confeccionado en tul y un hermoso ramo de novia protagonizado por todo tipo de flores, en especial por una protea que robaba atención. ¡Todo un acierto!
El novio
Para dar el “sí, acepto” Kris decidió utilizar un traje de novio tradicional; sin embargo lo que me fascinó de su imagen es que, contrario a lo que hubiéramos esperado, él decidió prescindir de la corbata con el fin de tener un look más casual y sin complicaciones. Los sellos clave, sin duda, fueron el reloj que portó para el gran día y ese boutonniere que hacía juego con el estilismo de su novia.
La ceremonia
Al aire libre y en un estilo completamente íntimo, Camille y Kris llegaron hasta el altar en una ceremonia encantadora. Las piezas de mobiliario de madera fueron la clave para crear un altar encantador, en el cual también se alzaban propuestas florales con una clara inspiración en la tendencia tropical. Ahí, acompañados de sus padrinos y de las damas de boda, estos novios juraron amor eterno frente a la mirada y un sinfín de emociones por parte de todos y cada uno de los invitados. La expectativa se dejaba notar en las sonrisas de emoción que compartían ellos mismos y, por supuesto, en las reacciones de los asistentes al ser parte de un acto romántico ¡de ensueño! La salida de los recién casados fue triunfal y, por supuesto, no pudieron faltar las fotos llenas de encanto con el mar de fondo.
La recepción
La decoración fue uno de los grandes atractivos en el banquete. Los montajes de mesa me encantaron por la mezcla de texturas naturales y un sinfín de colores que le daban protagonismo a la cultura mexicana. La cristalería fue elemental para marcar la elegancia de semejante celebración, aunque uno de los puntos clave fueron los centros de mesa aderezados con fantásticas proteas de distintos colores y bases con detalles en tono dorado. La mesa de postres, sin lugar a dudas, fue otro de los grandes focos de esta recepción, y es que entre la mezcla de mesas y la variedad de delicias a disposición de los invitados… ¡todos quedaron fascinados! Después de disfrutar de los obligados discursos emotivos y llenos de anécdotas por parte de amigos y familiares, Camille y Kris llegaron hasta la pista de baile para engalanar con su romance en un primer baile de esposos ¡maravilloso! Sin duda, ¡todo un acontecimiento!
Forma parte de una boda que, con los detalles acertados, logró crear toda una experiencia para los sentidos. Estoy segura que cada una de estas fotografías te darán la pauta para concebir un gran día lleno de amor, color y acentos por demás maravillosos.
Fotografía: Aniela Fotografía | Video: Recorramos Planetas | Wedding Planner: YucatanLove | Locación: Villa Grace Cozumel | DJ: The Black Jesus | Banquete: Kondesa | Flores: RAW Estudio Floral | Mobiliario: Minimal 4.0
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