Esperar el día de la boda se convertirá en una de tus actividades favoritas, y no es para menos; sin embargo llegará el momento en el que la música baje de volumen, las luces se apaguen, la fiesta termine y tú y tu novio inicien su matrimonio. Sin duda alguna, esta será la mejor aventura de sus vidas y tienes que prepararte para vivirla al máximo, por eso mismo a continuación te cuento cuáles son las 7 cosas (de muchas) que cambiarán cuando ya estés casada. Sin más, ponte lista para que las transformaciones no te tomen por sorpresa.
1. Te sentirás más segura
Obvio. El hecho de compartir todos y cada uno de tus días con el amor de tu vida es un regalo increíble. Te sentirás plena, feliz y convencida de que has iniciado una de las mejores etapas; sin embargo siempre ten muy presente que la comodidad puede llevar a la rutina, así que por nada del mundo dejes de luchar por el amor de tu esposo. Cada día es una gran oportunidad para demostrarle que es tu héroe y el mejor escudo, pero también para dejar claro que, sin importar cuántos años pasen, eso nunca cambiará.
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2. Tendrás que ser más organizada
Si eres como yo (me da pena admitirlo), seguro que tendrás que cambiar muchos hábitos. El desorden puede ser lo más cool mientras estás soltera, pero cuando llegue el momento de iniciar el matrimonio, seguro tendrás que eliminar tu gusto por dejar todo donde se te ocurre. Recuerda que ahora compartirás todo con una persona, así que ya se que se trate del lugar en el armario, de cómo exprimir la pasta de dientes, de dónde colgar la ropa o de en qué lugar guardar los papeles de los servicios, todo tendrá que estar muy bien organizado para que ninguno de los dos sufra.
3. Tendrás más expectativas
De todo tipo. El matrimonio es una base que no solo te permitirá conocer al máximo todas las manías de tu pareja, pero que también te invitará a esperar más de él en todos los sentidos. Ya no son novios, así que ahora se requerirá más presencia de los dos, más apoyo, mayor comunicación, más entrega, más experiencias, más de todo. Aunque puede parecer inocente al principio, solo asegúrate de no estar esperando un hombre perfecto, porque seguro te toparás con más de una sorpresa.
4. Elegir las batallas será tu prioridad
Aunque lo más sencillo es armar drama por todo, cuando se trata de un matrimonio las cosas cambian. Ahora, tanto tú como tu esposo, tendrán que valorar cuáles son los temas importantes y cuáles no. Lo ideal es que toda la convivencia se base en la armonía y aunque no se trata de que todo sea color de rosa, sí es vital que sepas cuándo molestarte y, en contraste, cuándo dejar pasar las situaciones y alivianarte.
5. Tus planes ya no serán los mismos
Seguro antes estabas acostumbrada a salir todos los fines de semana con tu novio o tus amigas, pero cuando te cases sentirás la necesidad de quedarte en casa y hacer algo lindo con tu pareja. La diversión no tiene por qué terminar, solo se transforma a un momento más íntimo y sin tanta compañía. Además, también te tocará ser esa persona que le diga a su pareja “ya vámonos”, sobre todo si tienen que levantarse temprano al día siguiente o si ya tienen compromisos en la agenda a los que no pueden faltar.
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6. Los gastos cambiarán
Igual antes gastabas el dinero en ropa, accesorios o lo que se te ocurriera, pero ahora será diferente. Seguro te verás más seguido en tiendas de decoración para el hogar, o bien, en almacenes en los que puedas comprar muebles para la casa o electrodomésticos. El escenario vuelve a ser normal después de algunos meses, así que no necesitarás olvidarte por completo de esos lujos que antes te dabas.
7. Estarás más consciente de quién eres
Y todos los días te darás a la tarea de conocerte más. Cuando estás casada será importante que tengas momentos de reflexión con el fin de que siempre te propongas ser una mejor versión de ti misma para ti, para tu esposo y para su vida en familia. No te sorprendas si con el tiempo te sientes o te ves distinta, solo son las mieles del matrimonio. ¡Disfrútalo!
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Más allá de todos los cambios que experimentarás una vez casada, lo que sí te garantizo es que el matrimonio te dará un escenario de máxima felicidad, plenitud y, por supuesto, una pareja que estará contigo en las buenas y en las malas ¡para siempre! Conclusión: no hay nada mejor.
Fotos de Kape Photography, Paulina Morales, Sacramentos Fotografía, Carol Cavazos, Israel Arredondo
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