Existen un sinfín de elementos que pueden convivir en la decoración de tu boda, y aunque uno de los puntos más importantes se concentra en la elección de la paleta de color, también hay ciertos detalles que puedes integrar para que todo tenga una mejor armonía. En ese sentido, los patrones generan una dinámica de color espectacular y, aunque no lo creas, son acentos que jamás pasarán de moda. Si aún tienes dudas sobre cómo transformar tu boda, acá te doy algunas ideas para que te animes a jugar con las rayas y su presencia en cada fase de ese gran día. ¡Toma nota de estos consejos!
Las rayas son de lo más versátiles, así que no tendrás ni un solo problema en acomodarlas dentro de la decoración de tu boda. Lo más común es que sean utilizadas como protagonistas en los montajes de mesa, sobre todo cuando vayan acompañadas del clásico efecto dominó en blanco y negro. Lo mejor de todo es que estos estampados se ven divinos en una boda de día o por la noche, ya que podrás sacarle provecho al patrón con luz natural, o bien, con una decoración con velas y series de focos que eleve la calidez del ambiente. Créeme, todo se puede si así lo quieres.
Si te gusta la idea de decorar con rayas y estás convencida de que quieres una celebración por demás elegante, entonces toma en cuenta que necesitarás al dorado como tu aliado principal. Los metales solo fungirán como acentos dentro de toda la decoración, pero gracias a ellos habrá un contraste que pondrá todo en balance. Puedes aprovechar este consejo para integrar las rayas y, por supuesto, una propuesta floral de lo más interesante. Recuerda que el contraste de color luce extraordinario con este tipo de decoración, así que no dudes en jugar con especies naturales en tonos encendidos y con mucha energía. Unos centros de mesa con flores en tono amarillo intenso, borgoña, rojo carmín y rosa chicle serán suficientes para crear toda una experiencia en el montaje de las mesas. Si te late la idea, entonces puedes incorporar textiles en color menta para magnificar la presencia de este patrón tan interesante.
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Si lo que buscas es una boda muy divertida, no dudes en la magia que puedes generar con una decoración con rayas y acentos en color rosa intenso. Este ejemplo me fascina, y lo mejor de todo es que lo podrás hacer presente en tu despedida de soltera o en una fiesta previa a la boda. Si decoras las mesas con sillas ghost, la visibilidad del patrón a rayas se verá aún mejor y, créeme, tus invitados quedarán encantados con el resultado. ¿Te animas?
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En el mismo tema de los montajes de mesa, te propongo que pienses en contrastes que lleven al máximo el poder visual de las rayas. Si logras conseguirlas, unas vajillas con este patrón se verán perfectas sobre un mantel en tono liso; sin embargo siempre puedes apostar por el contrario, dejando como protagonistas las rayas en los textiles e inclinándote por unas vajillas en las que se juegue con los bordes en color dorado y los acentos en toques de negro. Si se trata de magnificar el romance, toma en cuenta que el juego con flores que vayan desde el rosa desnudo hasta el rosa intenso te ayudará a crear un resultado fascinante ¡desde cualquier perspectiva!
Aunque no lo creas, la decoración a rayas no necesita que ir forzosamente en las mesas del banquete, sino que también puedes encontrarte con este patrón en la misma locación en la que decidas celebrar tu boda. El patrón no tiene que verse en cada rincón, pero sí debe estar presente como una parte importante de la personalidad del lugar, ya que con eso conseguirás tener una temática nupcial mucho más interesante y sin caer en lo literal. ¿Te gusta la idea?
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Las bodas en verano se antojan perfectas para que decores las mesas con unas servilletas que lleven el patrón; en contraste, siempre puedes apostar por un mantel a rayas y, como accesorios, una vajilla llena de color que marque un contraste divino entre todos los elementos que jueguen dentro de la propuesta estética. Los toques tierra y las texturas de madera pueden ayudarte a darle un toque mucho más romántico y llevadero a las rayas, sin tener que recurrir al combo clásico del blanco y el negro. Entre más color y contraste haya, ten por seguro que tu boda lucirá millones de veces mejor y más interesante a la vista.
Los textiles orgánicos a rayas se ven perfectos si los combinas con estampados tropicales y centros de mesa hechos con mucho follaje. Para mantener el balance estético en el montaje de las mesas, no dejes de lado la presencia de los cristales claros y los ornamentos en color cobre avejentado. Con esto tendrás una decoración alternativa y perfecta para disfrutar de un banquete ¡espectacular! Si quieres sorprender a propios y extraños, utiliza los bordados artesanales sobre el mismo patrón de rayas. Las flores son motivos de inspiración sensacionales para crear un efecto bohemio y muy romántico, además de que los textiles lucirán magníficos como manteles, o bien, como servilletas personalizadas para tus invitados.
Finalmente, incorpora las rayas y combínalas con propuestas de mobiliario distintas y con una clara inspiración en el diseño de interiores. Además de las flores en tonos rosados, las sillas con tintes de color azul y bordes dorados serán suficientes para que tengas una decoración muy elegante, eso sí, siempre acompañada del clásico patrón en blanco y negro. Si integras los manteles sobre mesas de mármol, ¡el glamour estará más presente que nunca!
Ahora sí, es tu turno para decidir cómo integrar las rayas en la decoración de tu boda. No dudes en jugar con la versatilidad de este patrón tan interesante y divino en un ambiente en el que se magnifique el contraste de colores y la originalidad. Todo se puede, siempre y cuando respetes la armonía de cada detalle y, por supuesto, de la dinámica total de ese gran día.
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