Estamos enamoradas a tope de todas las sorpresas que se esconden en esos destinos mágicos que envuelven a México. Esta vez, la boda de Andrea y Eduardo comprobó que no sólo el glamour puede estar a tope, sino también la elegancia y la belleza de una ceremonia tradicional y enmarcada en un recinto sin igual. El hotel Doña Urraca fue el escenario perfecto para dar a conocer una historia de amor definida por el encanto. No lo pienses más y enamórate de esta Real Wedding ¡de principio a fin!
Para dar inicio con la orden del día, Andrea disfrutó de una sesión getting ready, en la cual pudimos ser testigos de todos los complementos que conformaban su estilismo. Materializar el glamour fue una de las tareas principales de esta linda novia, por ello se decantó por un vestido de novia de silueta ceñida hasta la cadera, mismo que se distinguía a la distancia por su escote corazón y un sinfín de apliques cristalizados. Por otra parte, el recogido a la nuca, junto al tocado de flores fue sensacional; y no podemos dejar de lado el ambicioso maquillaje que realzó todo su estilo: un smokey eye y colores suaves como acompañantes.
Eduardo, por otra parte, siguió la tradición de las bodas mexicanas. Un chaqué en color negro fue el protagonista principal de su look, aunque tampoco pudimos ignorar la combinación perfecta que se logró con esa camisa y pajarita, ambas en color blanco. El diseño del boutonniere se mantuvo simple pero con el toque glam perfecto: una rosa en solitario acompañada de ramas de follaje… ¡Simplemente perfecto! El contraste entre ambos estilos fue el foco de atención que dejó a boquiabiertos a propios y extraños.
La ceremonia religiosa nos fascinó por sus detalles enigmáticos y esa esencia tradicional. El pasillo, decorado con un sinfín de pétalos de flores, anunciaba la llegada de los novios a un altar destacado por una cruz hecha de motivos naturales. El servicio estuvo matizado por tintes románticos no sólo en los adornos que enmarcaron esas cuatro paredes, sino también por las miradas de complicidad y el amor infinito que sobresalía de Andrea y Eduardo. ¡Todo un sueño! Al término de la ceremonia, los novios disfrutaron de una sesión de fotos privada, en ella disfrutaron de los espacios naturales del hotel Doña Urraca; escenarios que, desde el primer vistazo, conquistaron por su amplitud y ese encanto natural nunca antes visto.
Para la recepción, los novios disfrutaron de una fiesta llena de glam y los mejores detalles. La iluminación a colores, los montajes con tintes vintage, los focos colgantes y todo el mobiliario moderno fueron parte esencial de la decoración; un acercamiento a las mejores tendencias para bodas 2014. Los acentos con velas y con centros de mesa pequeños complementaron la atmósfera elegante y fuera de serie de esta boda en el Hotel Doña Urraca, Querétaro. Después de la clásica cena y del disfrute de esa deliciosa mesa de postres, los novios y sus amigos disfrutaron de la mejor música en la pista de baile.
Definitivamente, ¡en esta boda no faltó detalle! Si quieres disfrutar de una ceremonia igual y con ideas vanguardistas, también te recomendamos: la boda de Laura y Jero con un estilo urbano, la boda de Leslie y Luis en Hacienda de Cortés y 20 ideas geniales para que tu boda sea la más divertida.
Fotos cortesía de Antonio Saucedo | Locación: Hotel Doña Urraca | DJ: Mad Musik / Said Montufar | Decoración: Esencia Floral | Mesa de dulces: Torre Sucré
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